El estrés y la ansiedad son partes naturales de la vida. Cuando nuestros factores estresantes o pensamientos negativos nos superan, nos sentimos abrumados y necesitamos soluciones para reducir el impacto en nuestras vidas. Vivir con estrés tiene serias implicaciones a largo plazo para nuestra salud.
Es natural que nuestros cuerpo pasen por momentos de trauma y estrés y luego recuperen la salud completa.
Hay muchas cosas que puedes hacer para mitigar el estrés y el trauma y evitar que dejen huellas duraderas en tu cuerpo que, en última instancia, deterioren tu salud.
Esto es importante, porque si no liberamos los traumas y factores estresantes que experimentamos, nuestras células, orgános, tejidos y cuerpo físico, como un todo, literalmente cambian.
La epigenética ha demostrado, y se ha visto desarrollar en la medicina clínica una y otra vez, que el trauma gobierna qué genes se activan y desactivan, como se expresan y utilizan los genes y, literalmente, cambia la forma en que funciona el cuerpo humano.
Si sientes los efectos físicos de un trauma o estrés prolongado, que sepas que no está en tu cabeza; tu cuerpo es literalmente diferente físicamente despues de un estrés y trauma prolongados. Esto es normal y reversible.
Nuestras células, órganos, tejidos y cuerpo físico se aferran a los efectos del trauma emocional y esta tensión energética literalmente cambia la forma en que nuestro cuerpo puede funcionar.
Queremos exponer aquí una solución fácil para mitigar el trauma y el estrés a medida que ocurre. Es gratuita y fácil de realizar todos los días: Earthing o Conexión a Tierra
Por qué la conexión a tierra es buena para tu cuerpo
Tabla de contenidos
La conexión a tierra es el acto de conectarnos a la energía de reposición de la tierra, lo que nos permite absorber electrones a través del contacto corporal directo con la superficie de la Tierra. Esto ayuda a restaurar y revivir nuestros cuerpos.
Aprovechamos estos electrones reduciendo o eliminando las barreras entre nuestros cuerpos y el suelo. Hace generaciones, en la época rural, cuando la agricultura era una forma de vida, la gente pasaba más tiempo al aire libre cuidando sus cultivos, lo que era beneficioso.
Nuestro estilo de vida contemporáneo nos ha obligado poco a poco a pasar más tiempo en interiores y menos en la naturaleza, lo que no es ideal para nuestro estado físico y mental. Aquellos que pasan tiempo al aire libre y en la naturaleza notan una mejora en cómo se sienten,
La Ciencia detrás de la Conexión a Tierra
Se ha demostrado científicamente que la conexión a tierra es beneficiosa y reconstituyente, ya que reduce la inflamación, el estrés y el dolor, y reduce la presión arterial, mejora el sueño y aumenta la viscosidad de la sangre.
La naturaleza tiene el trabajo extraordianario de cuidarnos y la capacidad de ayudarnos a sanar. Conectarse con el planeta tierra puede ser la receta más eficaz para Tu salud y bienestar. Los electrones de la tierra son la medicina, y todo es gratís. El problema es que no aprovechamos esta energía de forma constante y diaria como lo hacian históricamente nuestros antepasados.
Caminaban descalzos y dormían directamente en el suelo o usaban pieles de cuero en los pies, conectándose continuamente con la energía natural de la tierra. Muchas enfermedades inflamatorias eran desconocidas en ese entonces.
Todos somos bioeléctricos. Como una batería, necesitamos recargarnos para funcionar a niveles óptimos. Considere la tierra como una bateria enorme que emite constantemente una carga eléctrica sutil y frecuencias globales (7,83 Hz para ser exactos) en el espectro del campo electromagnético. Esta frecuencia se llama resonancias de Schumann.
Podemos recargarnos conéctandonos a la nutrición eléctrica del suelo llamada electrones, que le dan a la superficie de la Tierra una carga negativa. Nuestros cuerpos necesitan electrones para funcionar de la manera en que el diseño de nuestro cuerpo los pretendía y para reducir la acumalación de radicales.
¿Como la conexión a Tierra reduce el estrés?
El Earthing o Grounding, es decir la conexión a Tierra, reduce el estrés al reducir nuestros niveles de cortisol, conmumente conocido como la hormona del estrés. No existe un solo ejercicio o técnica de conexión a Tierra, solo hacer contacto corporal con los elementos naturales puede reducir notablemente su estrés y ansiedad.
Por ejemplo, date un refrescante chapuzón en un lago, río u océano. Cava en el jardin. Abraza un árbol.
En tan solo 20-30 minutos, puedes notar la diferencia. Tu frecuencia cardíaca disminuye, te sientes más tranquilo y puedes experimentar más claridad mental.
«Conexión a Tierra» significa literalmente conectarse a la Tierra, pero el término también se usa para describir una manera de traer los pensamientos ansiosos y acelerados de uno al presente para «conectarse a Tierra» mentalmente. De ahi la expresion «estar con los pies en la Tierra».
Hoy muchas personas están afectadas por un estrés prolongado por la pandemia.
Esa situación pone al cuerpo bajo estrés crónico y realmente se están viendo los resultados del estrés traumático incluso el trastorno por estrés postraumático. La mayoria de la gente no ve un punto y final a esta situación.
Cuando pasamos por un trauma, y cuando pasamos por estrés, nuestro cuerpo responde de inmediato regulando nuestros órganos internos para ayudarnos a obtener esa postura de pelea o huida. Lo que sucede entonces es que tus músculos se tensan, tu ritmo cardiaco aumenta, tu cuerpo se contrae para prepararte para esa pelea o para correr o huir. Las pupilas se dilatan. La digestión se apaga, porque no es el momento de disfrutar de una comida tranquila y digerirla correctamente.
Cuando estamos alerta por estrés, nuestras hormonas, adrenalina y cortisol , son bombeadas en nuestra sangre. Nuestro sueño se ve absolutamente afectado y, con el tiempo, con el sueño afectado y con el aumento de la inflamación en el cuerpo y el aumento del estrés, incluso podemos tener cambios de memoria.
Estos cambios cerebrales, que se pueden ver en una resonancia magnética, se pueden abordar a través de la conexión a tierra
Tocar la tierra para que la conductividad de tu cuerpo esté vinculada al campo magnético y eléctrico que la tierra tiene y pulsa. En realidad la tierra tiene un latido cardiaco muy reconfortante que se llama resonancia Shuman y está pulsando constantemente esta frecuencia de curación.
Los estudios médicos han demostrado que cuando nos conectamos a tierra nuestro cuerpo se conecta instantaneamente a tierra y responde a esta enegia de la tierra curativa invirtiendo todos sus parámetros de trauma y estrés que realmente no queremos experimentar a largo plazo para que, toda la respuesta de lucha o huida que tiene a todo tu cuerpo tenso, comience a relajarse e invierta y vaya a lo opuesto, que es descansar y digerir para que la tensión muscular de la que hablamos sobre esa respuesta inmediata a la tensión muscular desasparezca.
Si conectas tu cuerpo a un aparato de medición de la tensión muscular en el instante que estas conectado a tierra, observarás que, la tensión muscular instantáneamente comienza a caer en los músculos. Tus músculos comienzan a relajarse.
Al igual que tu sistema cardiovascular cuando entra en estrés agudo, tu frecuencia cardiaca se dispara y tu vasculatura se contrae para conservar su volumen de sangre. Pero cuando te conectas a tierra, la variabilidad de tu frecuencia cardiaca se ve reforzada. Tu frecuencia cardíaca se ve reforzada. Tu frecuencia cardíaca se regula. Tus vasos sanguineos comienzan a abrir los capilares. Tu sangre fluye más libremente.
Para quien no conozca lo que es la variabilidad de la frecuencia cardiaca, decir que se refiere a las variaciones mínimas en el intervalo entre latido y latido del corazón que resulta del proceso respiratorio básico. Cuando inhalas, tu frecuencia cardíaca aumenta ligeramente. Cuando exalas, disminuye ligeramente. Esas fluctuaciones se ven en un gráfico de un electrocardiograma.
La variabilidad de la frecuencia cardíaca se ha convertido en una herramienta clínica confiable para medir el potencial de supervivencia después de un ataque cardiaco. La variabilidad de la frecuencia cardiaca no es lo mismo que la frecuencia cardiaca. A mayor variabilidad cardiaca mejor estado de salud. Como deciamos cuando te conectas a tierra esa variabilidad aumenta.
Cuando te conectas a tierra todo va desde un estado traumático tenso, constreñido, a un estado de flujo relajado, que le da a tu cuerpo la retroalimentación de que estás seguro en este momento.
Estudios de conexión a tierra han implicado el seguimiento de los sujetos de prueba antes, durante y después de las sesiones de earthing o conexión a tierra de 40 minutos mientras estaban sentados cómodamente en una silla reclinable. Confirmó un efecto de equilibrio sobre la función simpática y parasimpática y una restauración del tono normal que reduce la respuesta al estrés.
Estas mejoras van más alla de la relajación básica y pueden explicar en parte la retroalimentación repetida de las personas que experimentan una presión arterial más baja y arritmias mejoradas después de comenzar a conectarse a tierra.
Parte de la razón por la que tenemos esa respuesta inmediata al estrés es porque nuestro nervio vago inerva nuestra frecuencia cardíaca y nuestra frecuencia respiratoria y nuestra digestión. De modo que cuando pasamos por estrés y trauma todo se apaga temporalmente. Se supone que es temporalmente para que podamos funcionar mejor en una situación de alerta aguda.
Pero con el tiempo no es una buena forma de vivir y, por lo tanto, lo que hace la conexión a tierra es que influye de inmediato en ese nervio vago, para decirle al cuerpo que está bien, y reanudar la función normal. Básicamente la conexión a tierra le dice a tu cuerpo: Estás seguro.
¿Qué pueden hacer los terapeutas?
Pueden trabajar contigo para regular tu respiración y ponerte en situaciones en las que tu cerebro tiene pensamientos diferentes para que puedas tener una respuesta visceral diferente, pero a veces la conexión a tierra es una alternativa muy poderosa o se debe agregar la conexión a tierra a esas técnicas como la meditación o la respiración.
Nuestra respuesta inmediata al miedo depende mucho de tu infancia, de tus experiencias pasadas, depende de tu epigenética, de tu historial familiar de traumas, por lo que no siempre es fácil tener el control del pensamiento a nuestro nivel más alto en una situación de emergencia inmediata y además de eso no siempre podemos controlar nuestro patrón de respiración. Pero lo que puedo hacer siempre es simplemente tocar tierra, simplemente conectar mi cuerpo conductor a la hermosa energía relajante que resuena en la tierra e inmediatamente, no importa que pensamientos estén pasando en mi mente, no importa si tengo control sobre mi respiración, no tengo que sentarme alli y meditar o adptar una posición meditativa.
No tenemos que sentarnos allí y contar, ya sabes respiraciones. A veces en un trauma ni siquiera podemos usar esas herramientas simples de biorretroalimentación, pero lo que podemos hacer simplemente es tocar la tierra. Literalmente puedes tocarla. Puede ser mediante tocar una hoja en un árbol, o poner las manos en el suelo. Si estás en un ataque de pánico recostarte en el suelo o simplemente ponerte de pie sin zapatos sobre el cemento, la acera o el césped.
Valdría también poner las manos en la tierra tumbado mirando hacia arriba a las estrellas y permitiendo que tu mente haga lo que necesite para que tu cuerpo haga lo que necesite hacer y deja que la tierra sea la que dé a ese nervio vago esa biorretroalimentación de que está bien en ese momento para que no active el gatillo de la respuesta de estrés sostenido, y de trauma a largo plazo, cuando en este momento estás bien en esta conexión a la tierra.
Debido a esa conexión sucede una disminución inmediata de la tensión muscular. Por eso inmediatamente los latidos de tu corazón comienzan a calmarse y tu frecuencia respiratoria comienza a disminuir, entras en calma y te sientes bien y puedes tomar esa respiración profunda.
La conexón a tierra es una herramienta esencial para el trauma agudo, incluso en casos de ataques de pánico y situaciones de emergencia y luego, a largo plazo, permite que el sueño sea más reparador. Evita que tu cerebro tenga cambios a largo plazo y que tus órganos y los niveles inflamatorios de tu cuerpo tengan cambios a largo plazo y quizá, lo proteja de tener aumentos sostenidos a largo plazo de adrenalina y de sufrir fatiga suprarenal con el tiempo.
Dormir puede disminuir esos marcadores sanguíneos de inflamación y puede poner a su cerebro en ese patrón restaurador de curación que le da a su cuerpo una biorretroalimentación prolongada de que está bien, que va a superar esto, que es fuerte, es resistente.
Podemos pasar por momentos de estrés pero no necesitamos aferrarnos a esos momentos, podemos liberarlos para que no afecte la forma en que se lee la epigenética en mi.
La epidemia no debe afectar nuestra salud futura, no debe desencadenar la activación o desactivación de ciertos genes que no son lo mejor para nuestra salud, por lo que la conexión a tierra es un alivio inmediato y también es una protección a largo plazo. Se necesitan estas herramientas de curación útiles para superar el estrés, para liberar el trauma para que no afecte tu salud futura y no cree cambios epigenéticos.
Si deseas saber más sobre la conexión a tierra te animamos a ver más información en nuestra web, pero la próxima vez que sientas que tu frecuencia cardíaca aumente o sientas un nudo en la garganta o que tu digestión está apagada y no quieras tener problemas digestivos a largo plazo, o tensión muscular, o dolores de cabeza crónicos por tensión, conéctate a la tierra y eso puede ayudarte a que vuelvas a sentirte bien.
También es posible conectarse a tierra dentro de tu casa o mientras duermes. En nuestra web podrás ver como hacerlo. El grounding o earthing está en una posición única para borrar el estrés de tus tejidos físicos y proteger tu salud después del trauma. Sentimos que el grounding es una parte absolutamente obligatoria de un plan de curación del trauma…
